miércoles, 24 de junio de 2009

Palabras de Mario Llambías, Presidente de CRA

Compromiso intacto y sangre joven

Una vez más, el Congreso anual que reúne a todos los confederados sirvió para fijar posiciones a largo plazo, pero también para recargar energías, compartir realidades productivas y enterarnos cuál es la situación en lugares distantes de nuestra realidad.

Puntualmente, el Congreso Venado Tuerto 2009 ha aportado una importante concientización respecto de la participación ciudadana y el compromiso de cada persona como protagonista del cambio por el que estamos luchando desde las entidades.
También estos encuentros, sirven para que la comunidad rural confederada de todo el país confraternice, establezca lazos y empiece a trabajar en conjunto. Conocerse y establecer una relación personal es algo fundamental para estar cada vez más unidos.
Conocerse es clave para establecer y estrechar lazos. Por eso creemos, desde la dirigencia de CRA, que ha sido importantísimo el esfuerzo que hemos hecho para tratar de estar y acompañar a las rurales de base en todo el país durante momentos tan difíciles como los que hemos tenido que atravesar aún antes de 2008. Visitamos de sur a norte y de este a oeste a los asociados, escuchamos sus problemáticas y las llevamos al Consejo Directivo para luego elevarlas a las autoridades correspondientes.
Como contrapartida implícita, lo que buscamos es el compromiso de cada asociado, de cada productor, para que seamos grandes de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba. Para hacernos fuertes y compactos aun en nuestras diferencias, porque ya hemos aprendido lo que nos puede pasar por no estar unidos y por dejar que otros opinen y tomen decisiones respecto de nuestra actividad, nuestro futuro y el de nuestras familias y ciudades.
Los congresos también son un ámbito en el que se busca que la gente se exprese. No tiene sentido ir solamente a sentarse en una butaca a escuchar lo que otro nos dice. En este sentido, los talleres de discusión les dan la oportunidad a todos de ser parte activa y constructiva de nuestra realidad.
Un párrafo aparte merecen los jóvenes, los miembros de los ateneos o los productores de nuevas generaciones que están empezando a hacer su camino.
Su avidez por participar se vio plasmada en el enorme interés que demostraron durante los talleres. La juventud constituye el fuego sagrado que tiene que avivarse de a poco para crecer, nutrirse de la discusión y empezar a ganar espacios porque son la dirigencia del futuro. Vale recordar que los atenéistas de CRA tendrán su encuentro anual del 14 al 17 de agosto, en Corrientes.
En el proceso que a partir de marzo de 2008 empezó a vivir el sector agropecuario, los jóvenes tuvieron
gran protagonismo, porque muchos de ellos habían vuelto al campo cuando la actividad había empezado a
ser rentable. Pero cuando empezó el conflicto comprendieron que la única manera de proteger y cuidar lo suyo era participando.
Muchos comenzaron como autoconvocados y luego fueron encontrando su lugar en las entidades tradicionales.
De momentos de crisis como este surgen los recambios generacionales. Yo soy parte de uno de ellos, en
los años 1972-1973, cuando tenía 26 años y empezaba a dar mis primeros pasos en la actividad gremial.
Finalmente, un párrafo para las elecciones legislativas y lo que se viene después del 28 de junio. Sea cual fuere el resultado, los productores no tenemos que bajar los brazos. Es nuestro deber buscar los caminos para, sin poner en riesgo nuestra economía, seguir luchando por nuestros ideales
Debemos lograr un Congreso Nacional mucho más equilibrado del que tenemos, nuestra obligación es lograr una justicia independiente que permita evitar excesos, hay que respetar la Constitución y exigirle al Gobierno que deje de manejar las leyes a voluntad.
En definitiva, venimos peleando desde hace mucho tiempo por reafirmar los valores de democracia, república y federalismo. Estos son los pilares que debemos defender si queremos volver a tener el país que soñaron nuestros antepasados. Democrático, Representativo, Republicano y Federal. Todos unidos con estos objetivos.
Por nuestras familias, por nuestras comunidades, para derrotar a la pobreza y por un país en el que todos puedan ganarse su lugar con trabajo y dignidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario